JUDO: Sergio Ibáñez, una ‘llave’ de plata hacia la inclusión

El judoca aragonés hace historia tras subir al podio en el campeonato de España absoluto ante rivales videntes.

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Sergio Ibañez con su maestro Javier Rivero

Sergio Ibáñez acaba de escribir un nuevo brillante capítulo en la historia del deporte paralímpico español. El joven judoca aragonés ha derribado una barrera más hacia la inclusión tras subir al podio en el campeonato de España absoluto con una medalla de plata en la categoría de -60 kilos frente a rivales videntes.

El deportista del Judo Club Zaragoza exhibió su talento, técnica, osadía y tenacidad para coronarse como subcampeón nacional en el Pabellón Multiusos de Cáceres. En primera ronda se impuso al vasco Yasmani Rodríguez, en cuartos de final venció por ippon al madrileño Rubén López y después se deshizo en semifinales del valenciano Pedro Gómez. Solo el madrileño Justo Alejandro Rodríguez le privó del oro en una final muy ajustada.

 

 

 

 

 

“Es la primera vez que un judoca con discapacidad visual saca medalla en esta competición, es algo espectacular. Era su primera participación y ha estado magnífico en cada combate. Venía de un Mundial donde el resultado no fue bueno, pero su nivel es enorme y así lo ha vuelto a demostrar”, ha explicado Alfonso de Diego, seleccionador español de judo paralímpico.

Para Ibáñez, que nació con una deficiencia visual que le afecta al nervio óptico y es fotosensible a la luz, no es nada nuevo medirse a judocas que sí ven, ni tampoco conquistar medallas en torneos absolutos. De hecho, este año ya logró una plata y un bronce en dos pruebas de la Copa de España. Además, es el vigente subcampeón de Europa en la modalidad paralímpica y esta temporada consiguió una plata en la Copa del Mundo en Antalya (Turquía).

A los ocho años descubrió el judo cuando la ONCE le envió una carta con los deportes que se impartían. Aunque empezó en natación, se dio cuenta de que la piscina no era lo suyo y decidió cambiar el gorro por el kimono. Sintió un flechazo al atarse su primer obi y desde entonces no ha parado de progresar sobre el tatami. Esta medalla es una dosis de confianza en su camino hacia los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020.

Jesús Ortiz / dxtadaptado.com

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